Las obras para mejorar el Acceso Sur generan dudas. La aplicación de microaglomerado sobre la carpeta asfáltica existente y su notable rugosidad hacen que los conductores se pregunten: “¿Esto va a quedar así?”.

La respuesta de la Dirección Nacional de Vialidad (DNV) es “no”. Pero aseguran que será el mismo tránsito el que se encargue de emparejar el camino.

Para tener una idea de cómo quedará la ruta hay que mirar el carril este, trocha rápida, entre las calles Azcuénaga de Luján y Sarmiento de Godoy Cruz.

En ese sector ya se han aplicado las dos capas de microaglomerado y los vehículos empezaron a realizar su parte de la obra, sólo transitándola.

Julieta Nasazzi, supervisora técnica de los trabajos, aclaró: “El microaglomerado se aplica en dos etapas. Muchos ven la primera capa en la trocha rápida del carril oeste, que queda muy rugosa, y piensan que toda la ruta va a quedar así porque se habilita para agilizar el tránsito. Lo cierto es que aún falta la segunda capa y después será el mismo tránsito el que se encargue de emparejar el camino a lo largo de dos o tres meses aproximadamente”.

La supervisora recordó que el mismo trabajo se hizo en la ruta 7, a la altura de Uspallata. “Aparecieron las mismas dudas. Pero después los usuarios se dieron cuenta de que quedó bien”, señaló.

José Rubino, jefe de obra de la empresa contratista, ya había dicho en noviembre a Diario UNO: “El microaglomerado es la aplicación superficial sobre la carpeta existente de mezclas fluidas de pequeños espesores (12 a 15mm) y se hace en frío. Tiene la característica de poder habilitarse en poco tiempo.

Luego apuntó: “Este trabajo servirá como paliativo durante los próximos dos años”.

El plan tiene un plazo de seis meses para su ejecución, es decir, por lo menos hasta mayo en diferentes sectores de este tramo de la ruta 40 habrá hombres y máquinas trabajando en diversos horarios del día, incluyendo los pico.

La obra completa incluye fresado parcial en los lugares con deformaciones, sellado de grietas y fisuras de la ruta, bacheo y la realización de una carpeta de microaglomerado en las dos calzadas principales y banquinas a lo largo de los 17 kilómetros de este segmento.

En otras palabras, se mejorará la carpeta asfáltica de las calzadas y las banquinas internas y externas no serán más de ripio, como hasta ahora, sino de un fino asfalto. Esto no permitirá el alto tránsito en los costados de la carretera, pero brindará mayor seguridad vial.

En estos dos últimos meses han sido evidentes los embotellamientos a causa de los trabajos y también la impaciencia e irresponsabilidad de los conductores.

Muchos no respetan señales ni banderilleros. Incluso usan las banquinas cuando se produce una larga fila de autos y hasta invaden el sector con microaglomerado fresco con el solo fin de no perder algunos minutos en los lugares donde la circulación se autoriza sólo en media calzada.

Por esta razón las autoridades de Vialidad repitieron el pedido de precaución y paciencia a los automovilistas para los meses venideros.


El proyecto de una trocha más
Después de analizar el cada vez más saturado tránsito del Acceso Sur, llegó a los escritorios de la DNV un plan para ensanchar esta vía que usa gran parte de Luján, Maipú y Godoy Cruz para acceder a la Ciudad de Mendoza.

La DNV adelantó en noviembre que está previsto agregar dos trochas por mano desde calle Paso hacia el Norte y una desde el mismo punto hacia el Sur, hasta el puente del río Mendoza.

Todo se encuentra en la etapa de estudios preliminares, pero ya se estima un presupuesto de $300 millones. “No es una obra menor, pero si se llega a la conclusión de que es factible y se lleva adelante, será buena para descomprimir el tránsito de este sector”, dijeron desde la DNV.

Link: http://www.diariouno.com.ar/edimpresa/2012/02/07/nota293017.html